Venti tantos…
Tal vez treinta y tantos…
Quizá ya cuarenta… o incluso más.
¿Y ahora qué?… Esa es la pregunta que te ha traído hasta aquí. Y ahora… ¿qué? Lo has pasado bien, has hecho algunas cosas, y los años han pasado. Yo viví lo mismo. Llega un momento en que esa pregunta se te pega y no te deja en paz. “Y ahora ¿qué?” El buen sabor de boca del pasado, empieza a amargarse por la llegada de un futuro incierto. Los años pasan, y hay algunas preguntas y propósitos aparecen en tu cabeza: “tengo que ahorrar, no puedo seguir así”… “¿y si el día de mañana no hay pensiones?”… “¿y si enfermo?”… o peor aún… “¿y si enferma (si lo tienes) algún hijo, algún familiar, alguien que realmente te importe?”… ¿y si me despiden? ¿y si me quedo sin trabajo?…
Tal vez has tenido apoyos… tal vez los sigas teniendo… pero el pensamiento y la necesidad de ser independiente te asaltan. Necesitas ser tú. Necesitas ser libre. Necesitas cambiar algo que te permita realizarte…
Pero la vida no cambia, y tu espera se prolonga en el tiempo… y ese día no llega. Y tienes buenas ideas, y planes, y piensas con inteligencia, pero nada cambia.
El sentimiento es cada vez más agobiante…
“Quiero montar algo”
Pero no puedo. Necesito tiempo. Necesito dinero…
Te suena, ¿no?
Como te he dicho, yo viví lo mismo, tal vez un poco más acelerado por eso de que la vida, casi siempre, se las gasta duras… pero lo cierto es que no queda más remedio que mirar hacia adelante y tirar. Con una diferencia, eso sí. Hasta hoy, es probable que hayas estado tirando “por inercia”. No es culpa tuya. No nos han enseñado. Y muchas cosas, las hacemos pidiendo opiniones de otros que… ¿realmente saben? Los “amigos” que amablemente te alejan de la senda equivocada con su “eso es arriesgado”, “eso no va a funcionar”, “estás loco”…
Pero hoy vas a separarte de la manada, y vas a empezar a tener un poco más de (f)Independencia.
¿Y que es la (f)Independencia?
De momento puedo contarte que la (f)Independencia es un estado personal que te hará más libre.
Un estado que conjuga habilidades técnicas, habilidades interpersonales y habilidades financieras. Ya verás que unas se complementan con las otras, y si consigues conocer tan sólo un poco de cada una, verás que tu crecimiento personal va a ser exponencial.
Y conseguirás algunas cosas. Tal vez llegar a tu meta…
¡Y serás (f)Independiente!
Muy bien explicado 🙂
Muchas gracias, Bohemio. De verdad que me ha sorprendido tu comentario, porque como verás todo está muy reciente. Pero no dudes que trataré de llenarlo del mejor contenido. Si te quedas por aquí, lo verás.
A través de Cazadividendos conozco desde hoy este blog y llevo unos cuantos artículos leídos y cada uno engancha más que el anterior, o viceversa. Me lo guardo en Favoritos y desde hoy tienes un nuevo y agradecido compañero de viaje en nuestra búsqueda de esa (f)independencia.
Hola Lur,
El simple hecho de que hayas invertido tu tiempo en leerme, ya me llena de satisfacción y es motivo de agradecimiento. En nuestro viaje verás que llega un momento en el que tienes una enorme sensación de remar contra-corriente, de estar separándote de una inercia social con la que empiezas a ser crítico, de alejarte del pensamiento y hábitos comunes, de empezar a ser… un poco más (f)independiente. Pero, de vez en cuando, miras a un lado, y encuentras eso: un compañero de viaje que rema en la misma dirección, y con empeño parecido… Y al reconocerlo, te sentirás reconfortado.
¡Bienvenido!
otro compi que se suma a tu blog.
Es duro tirar por un camino que mucha gente (incluido el estado) no quiere que descubras: independencia financiera y ser tú tu propio conductor.
Ánimo y gracias por tus post, aportan mucho a la comunidad. Entre todos lo conseguiremos.
Saludos
Hola Carlos L,
Pues bienvenido. No soy tremendista, pero yo veo un auténtico complot: el estado quiere peleles… pero si tienes la suficiente inquietud como para haber terminado leyendo este blog… pues creo que estás en el camino correcto para no darles el gustazo.
Un saludo.
Hola,
Descubierto el blog y desde ya seguidor del mismo. Vamos por el mismo camino, la misma dirección. ¡Vamos!
Miguelón.
Hola Miguelón,
Disfruta del camino…
Sin prisa, pero sin pausa…
Se hace camino al andar….
¡Bienvenido!